cirque du (soleil) cheval

Si uno se queda atónito ante la capacidad de los humanos del circo canadiense para llevar a cabo acrobacia aparentemente imposible, el nivel de azoramiento durante el nuevo Cavalia, con caballos como artistas principales, será inaguantable. Aparte del terror ante la expectativa de que uno de ellos decida no actuar, nomás porque no, sin poder aplicarle amenazas de despido, este nuevo espectáculo está creando furor por el deseo del director de mostrar los caballos en libertad y no corriendo alrededor de un circo tradicional. Además, el entrenador está muy consciente de que los machos son orgullosos, musculares e intensamente competitivos, así como físicamente brutales si uno de ellos mira feo al otro, y todo esto se aprovecha en los trucos. La pista tiene cincuenta metros de ancho, para que los caballos galopen veloces con sus jinetes encima haciendo locuras, como cuando uno va con cada pie en el lomo de uno de dos caballos, éstos saltan y el jinete salta dando vueltas, para caer todos en la misma posición. Ay, qué lindos, después de 27 millones de dólares que costó entrenarlos, más vale que no caigan chueco, que no caguen mucho y que no la caguen gacho. ¡Suerte, Cagalia!