heads rolling

"Me dejo si también cuelgan a Bush"

Para celebrar el regreso del espectáculo crudo tipo revolución francesa y disfrutar el ahorcamiento de Sadam Hussein la próxima primavera en la plaza principal de Bagdad con un buen asiento y la ropa adecuada, que marque los cambios por venir, recomendamos el más novedoso concepto en la moda masculina, el kilt utilitario, del que se planea vender 15,000 este año. La tienda de su inventor (que no ha hecho más que atreverse a usarlos, pues la prenda original escocesa sólo ha sufrido el cambio del material con que está hecho) está en Seattle, pero los utilikilts se exportan a todo el mundo y son la neta en comodidad para el hombre agraviado por el claustrofóbico encerramiento de sus partes nobles. De aceptar usarlos, hay que seguir la tradición de los bebedores de whisky de no ponerse calzones, para dar máxima libertad de movimiento. Además, esta simpática prenda tiene mil bolsas que permiten cargar todo, desde celular, cartera y llaves hasta las herramientas de trabajo más utilizadas, libros para pasar el rato, documentos de trabajo, sangüicheras y ánforas refrescantes. Y no sólo eso; el atuendo viene en algodón de trabajo diario, o en nylon para correr y hacer deporte el sábado, en cuero negro (dice su lema: "face it, you aren't man enough for this baby!") para ser el hip del reven o en satín para ir de smoking a bodas.

"Primero hay que hacer pantorrilla"

Y para la gran ocasión, qué mejor que pasearse así ataviado por los desiertos persas que con la mascota ideal, el nuevo y mega enorme leogre, la maravillosa cruza de león macho y tigre hembra (el contrario, el tigreón, de tigre macho y león hembra, no sale tan bueno ni tan grande) que por accidente se logró generar en el instituto de especies en extinción de Florida, cuyos especialistas indican que sólo en cautiverio pudo suceder esto, pues el león vive en Africa y el tigre en Asia. A buena cogida intercontinental buen parto interracial. Apenas tiene 3 años, ya come 25 kilos de carne al día (¡wasa ese colesterol!), pesa media tonelada y sabe nadar, cosa que todo gatito odia, hasta los leones. No cabe duda, vienen tiempos superlativos.

"y hablando de cabezas, güerita, di adiós"