the virtual guest

"I'm master of the universe!"

Plaqueta cumplió años y estrenó depa y nos invitó a celebrar. Y vaya que lo hicimos, en un ambiente de cordialidad y civilizado jolgorio envidiable a estas alturas de decadencia. Ni la lluvia incesante afuera echó a perder la recién instalada alfombra, pues dejamos nuestros pares de zapatitos y tenis y tacones en el vestíbulo –porque el depa lo tiene, aunque luego se encuentra uno una cocina diminuta, compensada por los altísimos techos, la linda recámara y el gracioso baño- y depositamos las cenizas de nuestra continua fumadera en ceniceros que había por todos lados. Se habló de matemáticas, se habló en francés, se discutieron amoríos, de película y reales, se bebió a gusto y se pasaron las horas, no se dónde, pues a las cinco y media descubrí que no era la una y luego dormí todo el día. Y en ese estado fantasioso irrumpió en escena el distinguido Sala Verga, desde Phoenix, a través de la pantalla de computadora. Cuánta energía cálida transmitió, cuánta risa, excitación, inspiración –y falta de comprensión por quienes no captaban. Se crearon eventos para competir con tal pasión, pero ni la delicadamente difícil apilación de objetos ni los bailes coordinados nos distrajeron a los fans del personaje electrónicamente importado. Sí, qué a gusto me la pasé, como en fiesta de antaño en pleno siglo veintiuno.

"Salaver, Salaver, Salaver!"

"Chido, ¿qué me diste? How nice!"

"My mona lisa smile, hehe."