I am Pilates, your core strength!

Esperando la hora para beber sangrías veraniegas con Camila en la terraza del Condesa, me miré reflejado en el ventanal del estudio de Pilates frente a donde dejé el coche, panzota expuesta, hombros caídos, y entré a pedir datos y apuntarme para la sesión gratis. Camila corre maratones (su favorito es el de NY) y cuida su dieta, sólo fuma cuando está conmigo y una sangría le da el sueño más envidiable (¿será mi plática?), así que me animó a sanear mi estado de años de comer y beber y fumar y fumar y no hacer nada. Ayer llegué a mi sesión, luego de pasar por el Sears local a comprar mis pants super modernous adidas black mit orange ligeros para hacer deporte (al menos ese gasto me obligará a seguir). Pues nada, amé todo, desde la cama de madera con su colchoncito negro y sus resortes y poleas, hasta al instructor amable y dedicado y la sencillez y potencia de los ejercicios. Es un hecho (es un dicho, pues hay buen trecho al hecho), me inscribiré y bajaré la panza. Resulta que la teoría se enfoca en la fuerza central corporal, que es precisamente mi zona de abandono total: abdomen, nalgas y cintura. Al centrar atención en el cómo, mejora la postura, la fortaleza y la eficiencia, y de paso se extienden los resultados al resto del cuerpo, con el uso de músculos nunca antes advertidos. Ahora debo encontrar una alberca cercana para complementar con ejercicio aeróbico, y luego tantitas pesas para lo anaeróbico y voilá, seré joven y bello, eso es seguro.

Pilates: "Se exhala como se exprime un trapo, sacando toditito el aire. Sólo así trabajan y se refuerzan los músculos del abdomen." Y vaya que se nota. It works!

"Welcome to psychiatric ward VII, smile!"

"98, 99, las 100, bravo, y aplastar panza."

"Ay, hugui, de plano, que güeva me das"