lunes, septiembre 10, 2007

first marital row


La intención era cultural, y lo fue un rato. Llegamos temprano mini me y yo a San Ildefonso, así que pasamos al CC España y vimos una exposición muy emotiva sobre los exiliados españoles, su estancia en unos muy deprimentes campos de concentración al sur de Francia, y la llegada de los niños refugiados a México. Volvimos a la apertura sobre las fotos maravillosas de Kahlo y Peabody de edificios religiosos y de gobierno del fin de siglo con Díaz y brindamos con mucho vino rico y comimos muchos canapés cortesía de Salinas Pliego, pero pasamos a los vodkas para embriagarnos hasta el cierre, y ya en camino dimos va a la idea de una copita más en el Tom’s, de donde salimos a las cuatro con todo y amante para el trío, pésima idea mía que salió por la culata por los celos candentes que me provocó el par de jovencetes que pronto me ignoraron. Los corrí a gritos, y uno huyó avergonceited pero hugui volvió y lo perdoné y nos besamos y amamos con ese agregado intenso de luego del pleito. Falté al trabajo de nuevo, pues una reconciliación toma su tiempo. El miércoles no lo vi, ni el jueves, para poner las cosas en perspectiva (beber con otros) y el viernes nos fuimos a Cuerna de parejita linda y nos encerramos y cociné deli y vimos pelis y todo fue amorrr. El dice que vamos muy rápido, y yo, que hay que vivir la vida con pasión. A veces.

"¡Oigan, si no estoy viejito para nada!"

 

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