martes, junio 23, 2009

ten courses at oca

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Después de que el chef me botó diciendo es ese chico de nuevo, cuelga, le pedí a JP que averiguara cómo conseguir entrar a OCA (me habían dicho que no podías ir sin invitación) y él tranquilamente le escribió a Claudia Azpiri, que resulta ser amiguita (chicas Lomas) de Karen Wix, la joven y simpática dueña, quien de inmediato nos invitó a cenar. Fuimos el viernes y fue toda una experiencia. Nos trataron super bien (los ex meseros del Aguila y Sol ya tienen todo un trayecto) y nos dieron de beber suficiente para bajar los diez platos que integran el menú de degustación (casi no sobrevivimos a la mañana siguiente). Son (yo los disfruto tanto, pero puede sonar tan aburrido, que no sé, no me importa): flor de calabaza secada en nitrógeno, crujiente y rellena de puré de tamarindo, sobre espagueti de limón, una delicia. Ostión tibia solidificada con champaña, sobre algas como Sabritas, mousse de algo y cosas verdes. Una belleza de lagunita, fondo de foie, capa de pure de lichi y superficie de gelatina de vino tinto, con florecillas y cosillas regadas, maravilla de sabor. Langostinos fritos sobre puré de cacao, cubiertos de espuma de perejil, gran plato y muy original y memorable mezcla de sabores. Yema sólida y camarones con algo más, no muy recomendable. Pulpo asado y guisantes de pimentón envueltos en humo de madera, presentación muy simpática que llena el salón del olor de madera fina. Filete super suave de robalo con hoja crujiente de café y risotto de algo. Corte diminuto de cerdo, con piel crujiente, una delicia de sabor tradicional como para llenar si hace falta. Y los postres, pastel de te verde y helado de pistache con nubes de crema, riquísimo y muy diferente, y cajitas de tabaco y salsa de cereza intensamente roja, una dulzura de sueño. Vino dulce para postre, más oporto, agua, café expreso, y finalmente tuvimos que movilizarnos. Los baños son un truco visual y espacial con sus muros de espejo negro y ángulos agudos. El lugar es medio inhóspito, de pura piedra, espacios no utilizados, pero a gusto. Espero volver pronto, ¡gratis!
"la comida más dedeada del mundo!"
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