happy halloween (late)
O sea, yo ni me enteré de la fiesta de brujas este año. Llegué temprano a casa, guardé el coche, me dormí una siesta reposición de toda la semana, y nunca sonó el timbre con niños latosos exigiendo dulces. Ah, sólo una niña en un alto al día siguiente me pidió dinero, y yo diciendo no, se pide dulces, y tampoco tengo (sólo tenía los de la tos). Llegué a comer con mi tía la Chata (¿por qué le pusieron así? Debo averiguar) y en la residencia donde vive tenían un altar de muertos y comida para la ocasión. La sopa de camarón muy buena, lo demás equis, pero odio el postre de calabaza ese con pelos de fruta. El caso es que este es mi sobrino Emi, quien vive en Vancouver y es de lo más ligoncio, celebrando con su recién adquirida brujita, Chloe Devine.